Ponle Play 2025: discos nuevos de Diversify, Ela Taubert y Deftones

Ponle Play

Diversify – Thrill Seeker

Aunque parece el trabajo hecho por un conjunto de raperos, el DJ y productor nos entrega un disco que nos recuerda a aquel trip hop que dominó la escena a mediados de los 90, aunque no tan oscuro como en aquellos tiempos.

Sus ansias por ser diverso igual le permiten hacer una pieza de fiesta latina que hacer guiños al Wu Tang Clan, en una combinación que resulta agradable pero dispersa y si un sentido claro.

Se trata más de una ociosidad de buena factura y con un puñado de pegajosos temas que se sienten bien pero no van a ninguna parte.

Ela Taubert – Preguntas a las 11:11

Con las ansias de usar cada segundo para pedir un deseo, la cantante colombiana reflexiona y dejar salir todos aquellos reclamos en torno a una relación fallida. Válidos o no, la fuerza dramática con la que se permite arrojar interrogantes para finalmente poder dormir tranquila.

Lo curioso es que abre con la única canción que realmente habla de la idea de enamorarse de nuevo, como si de un álbum de purga se tratara, con ánimos a veces de resignarse a soltar o de plano echarle más sal a la herida.

Lo cierto es que la de Bogotá no tiene reparos en evaluar su autoestima aunque un evento de desamor y presume vulnerabilidad y sarcasmo cuando se encuentra sometida a una realidad que no le gusta.

Deftones – Private Music

Los de Sacramento abren con su rasposo sonido habitual y dan prueba de que el llamado nu metal sigue en buena forma, sólo que ahora se atreve a llegar a zonas en las que antes no se permitía, por eso hay una primera mitad totalmente reconocible y después nos lleva a un viaje atmosférico mucho más melódico y con una esencia menos amenazante.

Ya no son tan incómodos como antes, o, mejor dicho, siguen incomodando pero desde un sonido distinto, nutrido, con una tensión muy bien creada pues sabemos que en algún momento nos van a soltar un batacazo, una guitarra o un grito descomunal, pero han sabido manejar mejor sus tiempos para llegar a esos segundos.

Más atractivo aún, su juego de texturas nos hacen pensar que pasada esa primera mitad tan de ellos, esas voces exigentes no llegarán, pero claro que aparece, exhibiendo que no hay una reinvención radical de la agrupación, pero sí un ánimo por equilibrar de otro modo su tono pesado con la tranquilidad que viene tras liberarse de eso que nos daña.