Circo Olímpico o el país de la maroma es un proyecto que busca rescatar la tradición de los patios de maroma del siglo XIX.
Los patios de maroma fueron espacios informales donde se realizaban funciones teatrales, acrobáticas, circenses y de maroma (término que originalmente alude a la cuerda floja), con una fuerte carga crítica y burlesca hacia las instituciones sociales, políticas y religiosas.
La Secretaría de Cultura del Gobierno de México y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), a través de la Coordinación Nacional de Teatro junto a La Bomba Teatro, presentan Circo Olímpico o el país de la maroma,de Abraham Tari Beltrani, bajo la dirección de Paola Herrera, con Horacio Arango, Paola Herrera, Santiago Manuel Fernández, Ernesto Ponce y el músico en vivo Félix Ruiz.
Mediante la recreación del Circo Olímpico de 1857 ubicado en una casona de la 4a calle del Reloj (que hoy es la calle Argentina, en el centro histórico de la Ciudad de México), Circo Olímpico propone resignificar la realidad del siglo XXI en la que habitamos; reconstruir y reinterpretar el pasado.

Los patios de maroma eran espacios semiclandestinos o improvisados, generalmente en los barrios populares de la Ciudad de México y otras urbes, donde se instalaban escenarios rústicos para representar actos cómicos, acrobáticos y de teatro popular.
Se trataba de espectáculos ambulantes, accesibles a las clases bajas, en contraste con el teatro formal al que solo accedían las élites.
Esta obra retoma la tradición del circo y sus orígenes en México, en diálogo con elementos de la cultura popular de diversas épocas, poblando el escenario de imaginarios colectivos en los que el espectador puede reconocer parte de su identidad y de su historia.
Con elementos del circo, de la carpa, y de la maroma de patio se articula un espectáculo de números acrobáticos, rutinas cómicas, actos de mentalismo-magia, fantoches y funambulistas.

La música está estructurada a partir de la sonoridad propia de la Ciudad de México, entre reminiscencias de merolicos, y con canciones que en sus letras dan cuenta de diversas etapas de la historia del circo en México.
La composición musical es de Fernando López (Fores Basura); el diseño de iluminación, de Roberto Paredes con asistencia de Claudia Aragón; el diseño y realización de teatrino y utilería estuvieron a cargo de Felipe Lara; el diseño de vestuario es de Brisa Alonso; la realización del fantoche estuvo a cargo de Vianey Martínez con asesoría de Carolina Pimentel.
Está obra ofrecerá una temporada del 19 de julio al 3 de agosto en el Teatro El Galeón, Abraham Oceransky.
Sábados y domingos 13 horas.
Duración aproximada: 60 minutos.
Edad recomendada: 6+.
Precio del boleto: $150 adultos – $80 niños.