Foto: Notimex.

Corona Capital 2015: una democrática fiesta musical

 

Las quejas fueron numerosas cuando se anunció el cartel del Corona Capital 2015 ante la supuesta falta de nombres grandes como headliners. Como si los que se encargaban de cerrar los días respectivos no fueran a armar una gran fiesta. Y afortunadamente cerraron bocas.

En la historia del festival Capital ha sido quizás la edición más diversa y variada. Como en todo, hubo cosas buenas y aspectos que se pueden mejorar. Agradecemos que al menos no vivimos otro “Corona Lodazal” y el clima fue bueno con los asistentes.

El sábado, el comité organizador inclinó la balanza por los guitarrazos, mientras que el domingo el asunto se puso electrónico y todos movieron el piecito, de una u otra forma.

Kiesza demostró que va a crecer de forma bárbara. Tiene una potencia vocal impresionante y no necesitó de muchos recursos sobre el escenario para animar con su onda retro. Una pena lo del sonido durante su tema más conocido, pero ello sirvió para que los escépticos nos diéramos cuenta de que sí canta y de a poco puede ser un referente del llamado indie pop.

Notimex

 

The Psychedelic Furs animó al respetable con su contraste entre ritmos melódicos y el vozarrón de Richard Butler. Los británicos como los buenos vinos: pasa el tiempo y siguen armando buen show, pero, les faltó la famosa psicodelia en el escenario, cualidad que sí exhibió Father John Misty: el señor Tillman se contoneó como endemoniado y transmitió una enorme energía a los presentes.

Richard Ashcrfot regaló el momento “lagrimita” a los que nos quedamos enamorados de los 90: tocó temas de The Verve armado sólo con una guitarra y el poder de su garganta. No fue necesario más para que nos transportara a tiempos en que la banda pintaba para ser un referente del llamado brit pop.

Ryan Adams comenzó con mucha energía su set y de a poco se fue apagando. Quizás alguno de sus hits más conocidos hubiera prendido más a los que se dieron cita en el escenario principal para ver su acto, pero no fue así.

The Libertines llevó toda su irreverencia al escenario Doritos. La misma tromba que nos invadió en los 2000 llegó al Corona Capital y puso a gritar a todo mundo. La gran mayoría coreó los grandes éxitos de la banda y salieron de ahí más que satisfechos.

Notimex

Muse dejó satisfecha a la muchachada y varió el repertorio que presentó en la Ciudad de México en las 3 fechas que antecedieron a lo que hizo en el Capital. Afortunadamente tocaron temas de sus primeros discos, aquellos con los que nos ilusionaron. Si perdieron o no la brújula, juzgue usted mismo. En el Corona hubo mucho visual y poderío.

Porter Robinson entregó otro de los momentos tiernos de la jornada sabatina, con sus sonidos como de videojuegos de 8 bits y vocales agudas. La fiesta tierna se hizo presente.

Pero, el pachangón en forma, lo que los asistentes querían para el deschongue se quedó en la jornada dominical: George Fitzgerald y Tokimonsta hicieron lo necesario para arrancar motores y presentaron sets muy variados.

Notimex

 

Mew conquistó los corazones de los amantes de la música nueva y tocaron varios temas de su última placa, uno de los mejores discos del 2015; Spoon igual derrochó talento y conectó con la masa mientras que Primal Scream lanzó toda la vibra sobre la concurrencia al tiempo que subieron los decibeles de sus guitarras para un buen cabeceo previo a lo que vendría con Fatboy Slim.

Rockdro

 

El maestro Norman Cook demostró cómo hacer una fiesta con una nutrida colección de sonidos y sampleos, dos cámaras de video y visuales a prueba de apáticos. Sin parar, el de Bromley se extendió en su set y sin problemas hubiera regalado una hora más de no ser porque tenía que dar espacio a los cerradores. Sin dar más que pinceladas de sus grandes éxitos, el “chico gordo” llenó de buen ambiente el escenario principal con sus mezclas y guiños musicales.

Rockdro

 

El momento final de la noche llegó con Calvin Harris: puso a todos a bailar, cantar y a momentos trató de conectar con los asistentes, más allá del show monumental que le acompañó. Los beats inundaron el Autódromo Hermanos Rodríguez como si de un rave se tratara. A ratos así fue.

Hubo todo en el festival Capital, una celebración que en el papel no lucía tan jugosa para muchos, pero que entregó de más, sin necesidad de un solo peso pesado que acaparara la atención. Fue quizás el más democrático, en un tono que probablemente es el exacto para un conglomerado musical que va madurando en la forma correcta.

Rockdro
Rockdro

Juárez Góngora

Es orgullosamente yucateco. Egresado de la licenciatura en Periodismo en un colegio de la tierra del panucho y el salbut. Le dio por conocer varias zonas del país hasta que se avecindó en la Ciudad de México, donde se dedica a hacer textos para el mundo del internet. Amante de la literatura, melómano, pero primordialmente cinéfilo, de niño repasó películas en formato Betacam una y otra vez, hasta que finalmente, un buen día, fue al cine y de ahí no pudo salir.

Twitter 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Categorías